La comida fue buena, diría que tiene el mejor menú que he probado en cualquier aerolínea. Sin embargo la comodidad no fue la mejor. Viaje con mi novio y ambos queríamos cambiar de asiento ya que alrededor se sentía un olor fuerte. El viaje fue de 13 horas, no quisieron cambiar de asiento ocasionado que vomitara en el baño del avión. Las sillas no fueron tan cómodas pero lo salva el hecho de que dieron almohadas!